Rodrigo: El día en que su casa dejó de ser solo una estructura y se volvió una fuente de energía.

Rodrigo vive en Villa Alemana y durante años pagó su cuenta de luz sin cuestionarla. $85.000, $92.000, $101.000... cada mes un poco más. Un día, al ver una boleta particularmente alta, se hizo una pregunta que cambió todo:

“¿Qué pasaría si mi casa pudiera generar su propia energía?”

Investigó, pidió una evaluación gratuita con AVP PRO y se sorprendió: su techo tenía el potencial para alimentar todo su consumo. En menos de un mes, su casa estaba generando energía desde el amanecer.

Hoy, Rodrigo se siente empoderado. Mira su app y sonríe al ver cómo su inversión rinde todos los días.

“Creí que era caro, complicado o para casas grandes. Y no. Era para mí. Solo tenía que decidirlo.”

 

Anita y su Madre: Cuando el sol les devolvió la tranquilidad.

Anita vive con su madre pensionada. A fin de mes, la cuenta de luz siempre era una conversación incómoda. “¿Y ahora cómo lo vamos a hacer?”

Cuando escuchó sobre AVP PRO, Anita pensó en cómo esa cuenta podía dejar de ser una preocupación constante. Cotizó, aceptó la visita técnica gratuita y no lo pensó dos veces: instaló paneles.

Hoy, pagan menos del 20% de lo que pagaban antes. Y lo mejor, dice Anita, no es solo el ahorro.

“Mi mamá ya no se estresa. Podemos usar lo que necesitamos sin miedo. Esa paz no tiene precio.”

 

Don Manuel: El maestro que quiso que su techo trabajara por él.

A sus 62 años, Manuel pensó que ya había trabajado suficiente. Cada ladrillo, cada loza que colocó en su vida fue para construir su hogar. Pero había un gasto que lo seguía acompañando sin parar: la luz.

Un vecino le contó sobre los paneles solares y decidió averiguar. Con AVP PRO vio que su techo podía convertirse en una pequeña planta generadora.

Hoy dice con orgullo: “Ya no soy yo quien trabaja por la casa. Es ella la que trabaja por mí.”

La cuenta bajó más de un 70%. Y él, cada mañana, mira sus paneles como quien mira una obra bien hecha.

 

La Bodega Rojas: Cuando el vino se hizo con energía del sol.

La familia Rojas tiene una pequeña bodega en Casablanca. El frío controlado, las cámaras, los procesos... todo exigía energía. Y la cuenta era brutal.

Un día, decidieron invertir en energía solar. No fue fácil, había dudas: ¿funcionará? ¿valdrá la pena? ¿interrumpirá la producción?

AVP PRO les propuso una solución sin detener sus operaciones. Hoy, más del 80% de su bodega funciona con energía solar.

“El mismo sol que madura nuestras uvas… ahora alimenta nuestro negocio. Es parte de nuestra historia.”

 

Daniela: La profesora que hizo de su casa una lección viva.

Profesora de biología en un colegio de Quilpué, Daniela siempre enseñó sobre el cambio climático, la energía limpia, la sostenibilidad. Pero sentía una incoherencia: su casa seguía alimentada por energía contaminante.

Decidió tomar acción real. Con AVP PRO instaló paneles solares, y hoy su hogar es un ejemplo concreto para sus alumnos.

Cuando les muestra cómo funciona, cómo monitorea su consumo y cómo ahorra, los ojos de los niños brillan tanto como el sol afuera.

“Quería enseñar con el ejemplo. Hoy no solo hablo de cambio… lo vivo.”

 

La Villa Esperanza: Cuando los vecinos decidieron independizarse juntos.

Cansados de pagar boletas altas y vivir cortes sin explicación, 10 familias de una villa en Quilpué decidieron organizarse.

Se reunieron, conversaron, y juntos contactaron a AVP PRO. Gracias a su volumen, accedieron a un plan con bonificaciones y beneficios.

Hoy, no solo ahorran. También se apoyan, se enseñan a usar la app de monitoreo y comparten sus datos de producción.

“Nos unió una incomodidad… y ahora nos une una solución. Nunca pensamos que el cambio iba a ser también comunitario.”

 

Javier: El ingeniero remoto que convirtió su casa en inteligente.

Javier trabaja en terreno, fuera de casa gran parte del mes. Pero quería que su familia estuviera segura, cómoda y energéticamente independiente.

Instaló paneles solares con AVP PRO, y lo que más valora es el monitoreo a distancia. Desde cualquier lugar, sabe cuánto se produce, cuánto se consume y cuánto ahorra.

“Estoy lejos, pero tengo el control total. Es como si mi casa me hablara desde la app.”

El ahorro ha sido significativo. Pero lo que más valora es saber que el hogar funciona incluso sin él presente.

 

Brenda y Tomás: Los jóvenes que eligieron bien desde el principio.

Cuando recibieron las llaves de su primera casa en Limache, todos les decían: “Amoblen primero, vayan de a poco”.

Pero ellos pensaron diferente. Antes de poner cortinas o un TV gigante, decidieron instalar paneles solares con AVP PRO.

“Queríamos empezar bien. Sin deudas eternas con la luz. Con una casa que no solo gaste, sino que también nos devuelva.”

Hoy, con menos de 30 años, ya viven con ahorro mensual, energía limpia y autonomía.

 

El Spa de Marisol: Belleza con energía limpia.

Marisol tiene un centro de estética en Reñaca. Todos sus equipos funcionan con electricidad. Y su cuenta era una fuente constante de estrés.

Pero no podía parar su negocio para cambiar de sistema. AVP PRO diseñó una instalación rápida y sin interrupciones.

Hoy, Marisol sigue ofreciendo todos sus servicios, pero con un 70% menos de gasto eléctrico.

“Me siento bien sabiendo que ahorro, que uso energía limpia y que mis clientas también lo valoran. Es parte de mi propuesta ahora.”

 

Luis y su parcela en Olmué: Del mito al dato.

Luis creía que la energía solar no funcionaba bien en invierno. Tenía paneles “en la mira”, pero no se decidía.

Después de la visita técnica de AVP PRO, entendió que incluso en días nublados, los paneles generan energía.

Hoy, su parcela produce electricidad durante todo el año.

“Estaba lleno de mitos. Ahora tengo datos. Y mi boleta… lo confirma cada mes.”

Para Luis, pasar de la duda a la decisión fue el paso que lo convirtió en dueño de su energía.